¿Cómo iniciar un discurso?
miércoles, 20 de marzo de 2013
ORGANIZACIÓN DE IDEAS
Cuando
se sabe en qué tema se basará el discurso, es pertinente organizar las ideas
que servirán de apoyo al mismo, las que deben ordenarse en jerarquía de
importancia y que posean fundamentos sólidos, que permitan la comprensión por
parte de los destinatarios. No es bueno improvisar ni divagar en la exposición
de las ideas, es necesario tener sumamente claro de qué se hablará y el modo en
que se realizará el discurso, esto permitirá tener coherencia y facilitar que
el otro entienda nuestro planteamiento temático. Por otra parte, el emisor no
debe descuidar el informar acerca de los aspectos relevantes del tema y no sólo
ahondar en las ideas generales y profundizarlas, pues no sabemos si todo el
público maneja el mismo nivel de conocimiento y por ello es importante brindar
la mayor información específica posible.
RECOMENDACIÓN
El PARTICIPANTE, luego de exponer los puntos
alternativos, como también los criterios personales que podrían solucionar,
habrá llegado a la profundidad del sentimiento del receptor, creando en él una
motivación convincente, como también al orador; tiene que tenerla, quiere
decir, estar convencido de sus propias palabras, para que esto pueda ser
recíproco. Entonces el orador se dirigirá al receptor.
Esta es la única parte en el discurso en que
el orador conversa con el receptor.
CONCLUSIÓN FINAL
EL ORADOR, luego de haber motivado al
receptor, dará por finalizado su discurso utilizando las famosas arengas, ya
que ellas se utilizan en discursos combativos y persuasivos con el fin de
enardecer y estimular sus nobles sentimientos a la motivación profunda.
El orador, luego de
haber expuesto su discurso, será necesario que no utilice esta frase; por
ejemplo "PARA TERMINAR", HE DICHO" todo ello demuestra
incapacidad para concluir un discurso.
LA ARENGA, Su duración
no tiene límite, se puede utilizar al final del discurso o en los intermedios
del discurso; se puede recurrir a él cuantas veces sea necesaria, podría ser
una técnica que nos pueda salvar de algún olvido, y ésta siempre será una buena
alternativa salvadora.
Aparte de sus estructuras secuenciales, los
discursos tienen muchas otras estructuras en varios niveles, por ejemplo
estructuras de la gramática (fonología, sintaxis, semántica), el estilo, las
estructuras de la retórica (como metáforas, eufemismos), y las estructuras
'esquemáticas' que definen el formato global del discurso, como la
argumentación, la narración, o el formato convencional de una noticia en la
prensa.
DISCUSIÓN DEL DISCURSO O ALTERNATIVAS
En esta parte del Discurso, que es emotiva y
vibrante, porque el orador levantará la voz al punto y utilizará las mímicas
vehementes y rítmicas, señalará uno a uno los alcances alternativos sobre los
puntos dados en la segunda parte del discurso; así mismo, estos puntos
alternativos de solución podrían ser alcances de otras personas o también
sugerencias o criterios personales, pero que estos sean posibles de hacer y
verdaderos, porque de lo contrario se caería en la demagogia. Es necesario que
la firmeza de la voz del orador sea coherente y pareja para no ser perturbado
por las otras personas.
DESARROLLO O CUERPO DEL DISCURSO
Quizás es la parte más importante del
discurso, por la capacidad del conocimiento intelectual que tenga el orador
sobre el tema y su inmensa capacidad de memoria, que será muy valiosa en un determinado
momento. CICERÓN no se equivoca cuando llama a la memoria tesoro de todas las
cosa; así mismo, como es de nuestro conocimiento todos los problemas o
desarrollos sociales tienen sus raíces históricas, sean nacionales e
internacionales, políticas, culturales, científicas, etc. Lo que significa que
será necesario, cuando abordemos un tema, tener en cuenta esta recomendación,
quiere decir, hacer una reseña histórica sobre el tema, y aquí la importancia
de su conocimiento y preparación intelectual, como la capacidad de memoria.
INTRODUCCIÓN O SALUDO
El ORADOR o PARTICIPANTE tomará una posición firme, decidido, con porte, mirando fijamente a su interlocutor; procederá a saludar, pero guardando siempre el orden jerárquico de ciertas personalidades que se encuentran en el lugar. Luego tendrá como objetivo ubicar al auditorio, en el lugar mismo donde se desarrollarán los hechos o acontecimientos. Es necesario y elegante que el orador haga pensar al auditorio, utilizando citas, ejemplos, pensamientos o experiencias personales, pero todo ello debe tener una relación con el tema que se va a tratar; se utilizará este método para que nuestro discurso sea entretenido y no monótono y frío; es interesante mantener al receptor en una constante atención, de tal forma nos evitaremos pronunciar el nombre del tema. Nuestro discurso se pone más interesante cuando el auditorio procura adivinar qué tema va a tratar; si utilizamos este método en la medida que vamos hablando, más atención habrá de parte del receptor; lo importante de esta introducción es que debe ser interesante; debe gustar el ORADOR y ésta no debe pasar de 3 minutos. Para un discurso el orador no debe utilizar estas frases: BUENO, BIEN, DISCULPE, ETC; ni tampoco frases de falsa modestia como éstas: TRATARÉ DE HACERLO BIEN.
ORGANIZACIÓN DEL DISCURSO
Una vez entendida las diversas ramas por las que un redactor puede optar al momento de hacer un discurso lo siguiente es el análisis de la organización y que para nosotros un discurso bien estructurado y organizado debe dividirse en cinco partes que son:
o Introducción o saludo.
o Desarrollo o cuerpo del discurso.
o Discusión del discurso o alternativas.
o Recomendación o conclusión final.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)